Dos en uno: Leuze presenta el GSX, el primer sensor de horquilla combinado en el mundo
Con su nuevo sensor de horquilla combinado GSX, Leuze presenta una vez más una novedad mundial. Este dispositivo, que reúne las ventajas de los sensores ópticos y de ultrasonidos, completa la gama de sensores de horquilla de Leuze. El dispositivo está especialmente indicado para las máquinas de etiquetado utilizadas en el sector del embalaje.
Con la presentación del GSX, el primer sensor de horquilla combinado en el mundo, Leuze continúa con su tradición innovadora que se remonta a varias décadas. Leuze inventó no solo el primer sensor de horquilla para detección de etiquetas con el GS05, sino que también desarrolló el primer sensor de horquilla de ultrasonidos, el GSU14. Con la innovación más reciente de la compañía, el GSX (hay varios modelos disponibles), Leuze completa su gama de sensores de horquilla añadiendo un modelo combinado que hace ambas cosas: tecnología óptica y ultrasonidos. Reúne, por tanto, las ventajas de las soluciones ópticas y de ultrasonidos, y se dirige sobre todo a las máquinas de etiquetado utilizadas en el sector del embalaje. Con esta innovación, Leuze demuestra una vez más sus muchos años de experiencia y conocimientos de las aplicaciones de la Sensor People dentro de este campo.
Leuze amplía su gama de sensores de horquilla
Fijar etiquetas de diversas formas, tamaños y materiales a los productos y embalarlos por medio de una máquina de etiquetado es una de las principales tareas realizadas por el sector del embalaje. Para que su posicionamiento sea preciso, la etiqueta se debe detectar de forma segura y fiable, incluso cuando la velocidad del transportador es elevada. Esta tarea corre a cargo de los sensores de horquilla, que incorporan el transmisor y el receptor en un mismo dispositivo y aseguran una alta seguridad operativa. Estos dispositivos no solo son muy sensibles, sino también fáciles de montar y no necesitan alineación. Hasta ahora, Leuze ofrecía dos modelos de sensores de horquilla para este fin: sensores ópticos y de ultrasonidos. Ahora se encuentra disponible una nueva versión que combina un sensor óptico y de ultrasonidos, de manera que Leuze añade otra novedad mundial a su completa gama de productos.
Dos en uno: el primer GSX14E en el mundo
El sensor de horquilla GSX es el primer sensor de este tipo en el mundo al combinar los dos métodos de detección de ultrasonidos y ópticos en una sola carcasa. Proporciona las ventajas de ambos principios y se puede utilizar con una alta flexibilidad. Detecta con fiabilidad, rapidez y precisión una gran variedad de etiquetas, con independencia del material y las características de la superficie. Esto aumenta el rendimiento de la máquina y evita tiempos de parada. Incluso las etiquetas hechas con material BOPP cavitado heterogéneo se pueden detectar de manera fiable gracias al principio de funcionamiento óptico. El sensor de horquilla resulta especialmente adecuado para aplicaciones en las que sea preciso detectar varios tipos de etiquetas. Hasta ahora se necesitaban a menudo varios sensores de horquilla diferentes. El usuario no solo ahorra espacio, sino también tiempo y costes de instalación. El nuevo sensor de horquilla se puede configurar de forma rápida y sencilla mediante un botón de aprendizaje con el fin de configurar la combinación entre etiqueta y soporte. Solo hace falta una posición de montaje universal para todos los objetos.
IO-Link para facilitar la configuración y la gestión de recetas
El nuevo sensor de horquilla GSX incorpora un interfaz IO-Link, que sirve para configurar el sensor de forma sencilla, rápida y económica. El interfaz se puede emplear para permitir el aprendizaje remoto o bloquear los botones, entre otras cosas. Además, la gestión de recetas facilita el cambio de formato al sustituir los rollos. Esto significa que no necesita reajustar cuando se cambian los rollos a un formato de etiqueta diferente. El formato se cambia con rapidez seleccionando el conjunto de parámetros apropiado para el formato de etiqueta correspondiente. Esta selección de parámetros se efectúa directamente en la máquina de etiquetado a través del interfaz de usuario. Esto no solo ahorra tiempo de configuración, sino que también aumenta el volumen de producción y logra que el sistema sea más económico.